Los suelos laminados representan una óptima elección para el solado interior de las viviendas. Su reducido coste y su bajo deterioro comparado con los suelos de madera natural lo convierten en una alternativa a tener en cuenta.
Este tipo de suelo, se caracteriza por imitar distintos tipos de madera como el roble, nogal, haya, etc., con diferentes tonalidades, colores y acabados que incluso se pueden personalizar. La gran variedad disponible, permite decorar el espacio a cualquier gusto.
Para poder elegir el suelo adecuado, no solo debemos fijarnos en el apartado estético, sino también en sus características. Para ayudarnos en este sentido, los fabricantes clasifican el suelo por el tipo de uso que se le va a dar y podemos encontrarnos:
- Clase 21 – Para uso doméstico moderado.
- Clase 22 – Para uso doméstico general.
- Clase 23 – Para uso doméstico intenso.
- Clase 31 – Para uso doméstico intensivo o comercial moderado.
- Clase 32 – Para uso doméstico intensivo o comercial normal.
- Clase 33 – Para uso doméstico intensivo o comercial intensivo.
Por otro lado, nos encontramos con la resistencia a la abrasión, medida en la escala AC que va desde AC-1 hasta AC-6. Un suelo AC-3 es menos resistente que un AC-5 en términos de rayado y dureza del acabado. Es importante distinguir entre la capacidad de resistir una alta abrasión y la calidad del suelo. La escala AC mide una de las características que definen la calidad y no debería ser el único factor a considerar a la hora de elegir el producto.
Otros puntos importantes a tener en cuenta son el grosor y la densidad de cada lamina, a mayor grosor y densidad mayor robustez y mejores sensaciones en la pisada. Factores como que el suelo sea antiestático, antibacteriano, antideslizante o hidrófugo influyen considerablemente en las prestaciones, el coste y la calidad.
Por último, el punto más crítico de cualquier suelo laminado son las juntas que resultan de la colocación de las laminas. Un buen anclaje es esencial para garantizar la buena conservación, evitar las filtraciones y obtener un resultado estético impecable.